Hoy que ya no estoy junto a ti, no preguntes a la materia, a la razón. Voltea al cielo, abre tu corazón y descubre que mientras mantengas un pensamiento y un sentimiento de amor hacia mí. ¡Ahí vivo yo!
Rescata lo bueno que dejó mi estancia en la tierra junto a ti, lo malo, perdónalo. Y que mi ausencia física te recuerde que nuestra oportunidad es cada hoy.
Llena tus días con acciones bellas, dile a quien tienes cerca que le amas; y cuando sientas soledad o desconsuelo, percibe mi presencia en una estrella, en un rayito de sol, en el brillo de la luna o en el aroma de una flor.
También en la lluvia fresca y en el viento que acaricia tu rostro. Tal como percibes al creador, porque mi lugar se encuentra justo en su corazón.
Recuerda que no existe distancia, ni tiempo ni geografía para un sentimiento de amor.
El amor es un puente al infinito y hace escala justo en el corazón de Dios.
¡Te amo!
Autor Raquel Levinstein
Dra. muy bonita carta y con un gran sentimiento…muchas gracias por compartir
Muchas gracias mi bella Doctora por está carta tan llena de amor que da paz al corazón y nos hace sentir muy cerquita a nuestros seres queridos que solo físicamente ya no están, gracias mi hermosa Doctora por enseñarme a voltear al cielo y a confiar en Dios, gracias, gracias, gracias a usted y al Doctor Orlando y a todo su hermoso equipo de trabajo, gracias y bendiciones les mando un fuerte abrazo, gracias por estar en mi vida y estar siempre conmigo 🙏💖😘🌷
Gracias por siempre complacernos, gracias por estar siempre con nosotros, gracias a Dios por existir para nosotros y ayudarnos tanto, gracias a todo su equipo por ser tan lindos
Muchas gracias x esta hermosa carta Dios los bendiga siempre gracias
GRACIAS POR ESTAR Y COINCIDIR, SON PARTE MUY IMPORTANTE EN MI VIDA. SALUDOS DESDE CELAYA, GTO. 31 DE OCT 2024